Un cuento fanfic que quería hacer desde hace mucho porque incluye la inserción de un OC que quería revelar desde hacía mucho llamado Mor Kayra, pero en fin, disfrutadlo y espero poder hacer más a futuro :3

STAR WARS: NUEVA REPÚBLICA
PARTE I: PRODIGIOS DE BURNIN KONN
Autor: Manuel Rodrigo Morales Reyes
Nota: Esta es una historia ficticia tomando como base el ya extinto videojuego STAR WARS REVOLUCIÓN (UPRISING) para dispositivos móviles, y no tiene otra intención que la de entretener sin infringir derechos de autor.

Hace mucho tiempo, en una galaxia muy, muy lejana…

La Galaxia ha sido liberada, la Rebelión ha derrotado al malvado Emperador DARTH SIDIOUS y matado a DARTH VADER en la batalla de Endor. Las celebraciones a lo largo del Borde Exterior no se hacen esperar y comienzan a dar la buena nueva a los planetas vecinos.
Sin embargo, en el Sector Anoat, aún bajo el dominio total de una remanente del Imperio, el GOBERNADOR ADELHARD ha ordenado posicionar sus destructores estelares alrededor del planeta Burnin Konn y Delphon, estableciendo el Bloqueo de Hierro, dando la noticia de que el Emperador está herido y se está dando caza a los rebeldes.
Mientras, en Burnin Konn se están realizando pequeñas escaramuzas contra el Imperio Galáctico y entablando lucha en cada rincón del planeta. Pero el comandante BRAGH ha ordenado a sus hombres exterminar todo indicio de rebelión o llevar ante la justicia a todos aquellos que se opongan…

Burnin Konn es un planeta minero, se caracteriza por sacar enormes cantidades de cromo y otros minerales valiosos. A su alrededor abundan asteroides y algunos fragmentos de naves destruidas de batallas espaciales de antaño. Su coloración es casi rojo, como Anoat, Nar Hypa, Pujool y Mataou.
Un Destructor Estelar invade su órbita, acompañado de varias fragatas y tres destructores más. El Gobernador Adelhard contempla el planeta desde un ventanal del puente de mando.
-Señor, nadie entra y nadie sale, el Bloqueo ha sido un éxito.
-Bien –Se giró a su oficial y dio una nueva instrucción.- Ordene a sus escuadrones a desplegarse por todo el planeta, no quiero seguir escuchando de propaganda rebelde
-En seguida
El Oficial caminó por el pasillo que divide a los demás oficiales que tratan las computadoras del crucero. Unas puertas se abrieron, salió el Oficial a la vez que el Comandante Bragh entraba.
-He desplegado una reserva de mis mejores hombres en el destacamento como lo pidió Gobernador –Bragh se posicionó a un lado de su compañero.- En cuanto aparezcan más rebeldes, no lo dudarán, los aplastarán en cuanto los vean.
-Excelente trabajo compañeros –luego se giró a una oficial.- ¡Covar! ¡Activa el equipo de transmisión!
-¡Enseguida capitán!
En el suelo se activaron unas luces, todo mundo procuró hacer el menor ruido posible y dejaron que el Gobernador dijera su discurso…

Mientras tanto, entre las nubes, varios cazas TIE patrullaban la zona residencial y pasaban entre los cañones y acantilados de esta, pasaron cerca del mercado, dónde se encontraban varios integrantes de la Liga de Comercio, entre ellos, Zarpino, el líder del grupo.
-Si ven los artefactos que traemos, podrían arrestarnos, ten cuidado –dijo a un asistente que luego procuró tener las cajas menos visibles-.
Mucha gente estaba comprando alimentos y suministros aquél día, varios de ellos alienígenas y uno que otro humano. De entre la multitud aparecieron un oficial imperial y dos stormtrooper.
-Por decreto de Nuestro Glorioso Gobernador, todo habitante de este Sector, debe permanecer dentro del planeta hasta nuevo aviso, mientras se les proporcionará víveres y cupones para gastar en las tiendas expendedoras.
Un grupo de gente empezó a renegar y a quejarse, el oficial respiraba con calma, suspirando por la reacción de la gente, sin querer volteó hacia una manta y vio lo que parecía ser la caja de un arma larga de fuego.
-¿Quién es el dueño de esa tienda?
Nadie habló, pero Zarpino al estar cerca de la tienda dio la impresión de ser él.
-Tú. Dime que es lo que escondes bajo esa manta
-No es nada, sólo son unas cajas de herramientas para arreglar aparatos eléctricos
-Enséñemelas
-No puedo, es que requieren de contraseñas y es un gorro volver a instalarlas
-Si sale con evasivas no me dejará más remedio que encarcelarlo ¿se sigue oponiendo?
-Este… no me estoy oponiendo
-Enséñeme pues que es lo que trae ahí
Zarpino no supo que hacer pensó en pedir ayuda cuando un disparo de bláster dio de lleno en la sien del oficial, tirando su gorro. Los stormtrooper trataron de reaccionar al agresor cuando les dispararon inmediatamente.
-¡¿Te has vuelto loco?!
Un joven de cabello blanco y largo, empuñaba una pistola que humeaba.
-Tenía que hacerlo Zarpino –dijo.- ahora vendrán por mí, te dará tiempo para hacer tus movimientos
-De acuerdo, Kayra, no dejes que te maten.
Aquél joven echó a correr entre la multitud, cruzó una compuerta enorme que daba al interior de un muro de roca, tras cruzarla, llegó a una zona con barandales y plataformas, correspondientes a una zona minera; varios brazos mecánicos perforaban la roca y sacaban cristales para su transportación.
-Te compré por nada hace tiempo, parece que hoy vas a hacer tu trabajo
Colocó un dispositivo con fragmentos de cristales kyber entre los pilares de la compuerta, y se arrojó contra el suelo a tiempo en cuanto este explotó. Rocas cayeron sobre esta hasta bloquearla.
-¡Perfecto!
El joven se levantó y echó a correr por entre las plataformas ignorando su alrededor. Sólo que no muy lejos unos hombres contemplaron como el fugitivo pasaba de una plataforma a otra, adentrándose a su territorio.
-Mira, creo que es Mor Kayra –sacó un rifle y apuntó.- Demostrémosle que sucede cuando la Liga de Comercio entra a nuestro territorio.
¡BANG!
El muchacho reaccionó ante el disparo de bláster pegó sobre un tubo que casi daba a su pecho, desenfundó su pistola y respondió el ataque.
-El tipo nos responde el fuego ¡mátenlo!
Varios de sus secuaces corrieron hasta su objetivo. Él rodó en maroma hacia una formación rocosa y desde ahí disparó, matando a tres. Luego siguió corriendo hasta quedar fuera del alcance del rifle de ese sujeto.
-¡Maldita sea! ¡Se escapa!
Él llegó hasta unas pequeñas escaleras que daban a un elevador cilíndrico pero no lo tomó siguió un camino opuesto a este bajando otras escaleras, sólo que al llegar al último escalón, el elevador se abrió y salió un hombre fornido, un zabrak color naranja.
-Mor Kayra, me he enterado de lo que has hecho.
-¡Tryken! Lo tengo todo bajo control, créeme
-El Imperio no tardará en descubrir quién es el homicida de sus colegas, no puedo permitir que pongas en riesgo la Liga de Comercio.
-No espera –se rascó la cabeza y puso su mejor sonrisa.- el imperio seguirá un fantasma, nadie vio y escuchó nada, por eso escapo
Tryken sin mediar palabra desenfundó su pistola.
-¡Eh! Amigo –Mor Kayra hizo lo mismo.- no somos enemigos, no busco pelear contra los míos.
-Si no vienes conmigo no me dejarás otra alternativa
Hubo una pausa, Tryken apuntó al mismo tiempo que su contrincante, ambos dispararon sus armas, sólo que Mor logró acertarle en el pecho.
-Lo siento Tryken, créeme que lo siento –y siguió corriendo-.
Alcanzó un lugar bastante abierto que llevaba a múltiples elevadores, leyó cuál daba con el estacionamiento.
-Vaya, vaya, vaya –el hombre del rifle que antes figuró en este relato, apareció a una lado de él acompañado de varios secuaces.- ¿Nadie te dijo que pasaba si entrabas en el territorio de Los reyes del Cromo?
-Me acuerdo muy bien de sus reglas, pero estoy con prisa, podemos hacer que mi asesinato sea otro día, ¿Qué tal el jueves? Es el día que más odio
-Hoy es jueves
Mor Kayra se quedó pasmado por su mala respuesta, volvió a sonreír.
-Podemos estar en paz, lamento la muerte de esos hombres pero puede que te pague con algo mucho más valioso ¿Qué dices?
-Yo sé que es valioso: El Imperio ofrecerá una cuantiosa recompensa por que hayas matado a un oficial
-Parece que los negocios no se me dan
-Vaya que sí Mor, le daremos tus huesos a tu hermana si es que la encontramos
-Querrás decir: Si es que sales vivo de esta
Acto seguido, corrió, hizo una maroma en el aire, aterrizó y disparó su arma a diestra y siniestra contra los demás secuaces. Su contrincante apuntó con su rifle fallando sus tiros.
-¡Ahhh!
La mayoría había muerto, el resto se acobardó y se hizo hacia atrás. El jefe del grupo sacó su espada retráctil y dio de lleno en el pecho de Mor, sacando algo de sangre.
-¡Errgghhh! –soltó su pistola y se arrodilló-.
-Te lo dije Mor… tu hermana…
Nuestro héroe inmediatamente se levantó, impactó de lleno en el estómago de su oponente y lo llevó hasta un barandal dañado, que daba al kilométrico acantilado.
- Y yo te dije si salías de esta… vivo
Mor empujó con tal fuerza que lanzó de la plataforma a su adversario.
-¡Nooooo!
Aquél hombre se fue perdiendo entre la niebla del abismo.
-Ahora bien –recogió su pistola.- ¿Alguien más quiere aprender a volar?
Los demás ahí presentes hicieron ruidos extraños y salieron despavoridos del lugar.
-Nhh –se quejó, el corte en su pecho no era grave pero si era de tenerse en cuenta, caminó hasta un elevador, entonces lo vio.- Este me será útil.
Un tanque de bacta de trabajo, su tamaño era ideal para atender a los mineros que constantemente se hacían daño al hacer sus faenas, gracias a este equipo, curarse era cosa de poco tiempo. Tocó un interruptor y este roció parte de su fluido sobre el cuerpo del joven, haciendo que la sangre dejara de salir, reavivando su piel hasta que hiciera costra de inmediato.
-Bacta, que bien se siente
Luego caminó hacia el elevador, no sin antes reparar en una mochila cilíndrica que alguien abandonó, dentro tenía 3600 créditos galácticos y algunos cristales para mejorar artefactos. Sonrió, subió al elevador.

Mientras tanto en el Mercado se hacía una investigación, recogieron los cuerpos y tomaron declaraciones, Zarpino se ponía un poco nervioso al ver como los stormtrooper inspeccionaban cada rincón del mercado, buscando.
-Zarpino, has visto a mi hermano
Zarpino volteó, se trataba de Riley Kayra, hermana de Mor Kayra, estaba cojeando de la pierna derecha, se apoyaba con una prótesis.
-vendo algunos artilugios SI te gustaría comprar
-De acuerdo, ¿No sabes DÓNDE PUEDEN ESTAR mejor colocados?
-En tejados, el frente del hogar y si te apetece tengo dispensadores de bebidas ideales para una CANTINA
-Bien, deme un repuesto y una batería
-Son 2000 créditos, y un favor, cuida muy bien de él
En el otro extremo del cañón, en dónde se econtraba el Mercado, también era visible uno de los establecimientos más importantes de la zona: La Cantina La Veta de Carbono. Mor Kayra se encontraba bebiendo en la barra mientras un droide de protocolo le preguntaba si quería más.
-No por ahora, no planeo emborracharme
-Yo si estoy dispuesto –alguien habló.- dos tragos más por favor
-“Sonrisas” Dapp, ¿Qué haces aquí?
-Me he enterado de tu hazaña, fuiste muy valiente, eres de respeto
-No hice nada heroico, sólo quería que Zarpino estuviese bien, le debo mucho
-¿Ah, si? ¿Cuánto le debes? ¿5000? ¿8000?
-No es monetario, es emocional, un amigo pues
-¿Y no soy tu amigo?
-Prefiero no entrar en asuntos de la Liga de Comercio directamente
-Pero ya estás dentro, desde que mataste a uno de los Capos de los Reyes del Cromo, te has tirado toda una banda encima Mor, déjame enseñarte algo
Ambos se levantaron de la barra y fueron a una mesa apartada, en la que se encontraba Tryken.
-Créeme que en serio lamento el disparo que te hice, lo juro
-Tú que sabes, duele muchísimo
-Pero su intención no era matarte Tryken –habló Sonrisas mientras se sentaba.- el conoce nuestras armaduras y cuánto resisten, además no mataría a uno de los nuestros ¿verdad?
-Verdad
Una puerta se abrió, Riley entró y empezó a buscar, encontró a la Banda y se sentó mientras regañaba a su hermano.
-¿Por qué mataste a esos hombres?
-Se estaban metiendo con Zarpino, lo tenía que defender
-Pero mataste a un oficial imperial, ¿tienes idea de lo que significa esto?
-Que soy el héroe de Burnin Konn
Los demás rieron
-Riley –Sonrisas comenzó.- le estaba proponiendo a tu hermano que se uniera oficialmente a los Guardaespaldas de Zarpino
-No, mi hermano no va entrar de lleno a toda la cosa chunga que se traen ustedes
-Ganará mucho más que arreglando piezas electrónicas y puliendo cristales
-No este… -notó que su hermano tenía una mochila cilíndrica.- ¿de dónde la sacaste?
-De los reyes del Cromo
-No puede ser, no puede ser…
-Riley, no pasa nada, me encontré algo de dinero y unos cristales
Riley sin pensarlo dos veces le dio una bofetada, llamando la atención de todo mundo.
-¿Riley qué te pasa? ¿Se te subió el alcohol?
Otra bofetada
-¿Tomaste alucinógenos de barra?
Otra más
-¿Ya te mediste tus midiclorianos?
Tras decir esto último, recibió una bofetada tan fuerte que se le quedó marcada la mano en toda la cara.
-Sonrisas, lo he pensado mejor: le entro –se levantó de la mesa y le extendió la mano.- Si realmente voy a proteger a Zarpino y voy a ganar más, le entro
-Así se habla muchacho –Sonrisas le extendió el brazo y lo saludó.- pero primero entrénate con Tryken.
Tryken se levantó de la mesa.
-Papanatas, si realmente quieres estar en el medio, a cambo de créditos, te enseñaré a dar algunos buenos golpes
-Vale, vale
-Mor, soy tu hermana, piensa en mí, arriesgarás tu vida por nada –su hermano se le acercó.- si mueres, me quedaré sola.
-Riley, estaré bien, es sólo un trabajito, no me pasará nada –se giró a Sonrisas.- ¿Cuál sería mi primer misión?
-Los miembros del Rayo Solar han robado algunos cristales, quiero que los recuperes y puede que te quedes con un par.
Riley y Mor se miraron el uno al otro y luego otra vez a su nuevo jefe, Mor se rió en voz baja.
<<Continuará>>