Prácticamente no había pasillo hasta la cocina ya que esta se encontraba pared con pared con mi habitación, así que al salir solo tenía que girar a la izquierda. En frente se encontraba la puerta del baño, y normalmente hubiese ido para hacer un primer un pis, pero tenía tanta prisa que no le había dado tiempo a mi vejiga de mandar la señal de “lleno”. A la derecha se encontraba el resto del pasillo, que daba a las habitaciones de mis hermanos, Shyna a la izquierda y Moku a la derecha, y la de mi madre, Mahla, al final.
Al entrar en la cocina mi madre se encontraba a mi izquierda, cocinando. Es una osa perteneciente a la familia de los Ursus americanus, u osos negros, al igual que el resto de la familia. Es la más alta de los cuatro, aunque mi padre lo era aún más, extrañamente los tres hermanos somos más bajitos que nuestros padres, seguramente por la mala alimentación debida a los habituales problemas económicos. También es la más grande en general. Su pelaje era mayoritariamente negro a excepción del hocico, la barriga y las patas delanteras desde el codo. Ahora mismo se encontraba vestida con una camiseta muy ancha, unos pantalones holgados y un delantal que empezaba a ser demasiado viejo. Cojo un vaso y lo relleno de agua de la cubeta recién llenada por el servicio municipal de agua, o SMA, carros de madera y hierro con enormes barriles llenos de agua recién recogida del río que llevaban a las casas los bueyes más fuertes del pueblo todos los días a primera hora de la mañana.
- Buenos días mamá - Saludo como si nada intentando disimular antes de beberme de un trago el vaso entero de agua.
- Hombree, mira quién ha aparecido por fin – Definitivamente está mosqueada.
- Vendrás hoy al regreso de los mensajeros? – Intento cambiar de tema, con suerte me puedo librar de una regañina que ya se ha vuelto bastante habitual.
El regreso de los mensajeros es un evento que se celebra cada 21 días en el cual los mensajeros, habitantes de todas las especies de esta aldea que parten a poblados humanos cercanos para "coger prestados" tanto documentos de utilidad como ropa, utensilios y comida, regresan al pueblo. Era el momento más esperado por todos, la plaza se decoraba con pancartas y guirnaldas y la aldea entera se inundaba de música y festividad.
- Esta vez me quedaré en casa, tengo mucho por hacer. Por cierto, tienes en la mesa el desayuno preparado - dice señalando la gran mesa del salón donde comemos, al otro lado de la sala. En ella hay situado en el centro un bol grande de barro lleno de un montón de frutos, flores y bellotas típicos de la zona que debía haber recogido mi madre al amanecer, después de que pasase el SMA por casa. Me como todo de un bocado y salgo corriendo
- ¡Que tengas suerte con Fahron! -.
- ¡Gracias! La necesitaré - Me despido cerrando la puerta y saliendo corriendo.
Al entrar en la cocina mi madre se encontraba a mi izquierda, cocinando. Es una osa perteneciente a la familia de los Ursus americanus, u osos negros, al igual que el resto de la familia. Es la más alta de los cuatro, aunque mi padre lo era aún más, extrañamente los tres hermanos somos más bajitos que nuestros padres, seguramente por la mala alimentación debida a los habituales problemas económicos. También es la más grande en general. Su pelaje era mayoritariamente negro a excepción del hocico, la barriga y las patas delanteras desde el codo. Ahora mismo se encontraba vestida con una camiseta muy ancha, unos pantalones holgados y un delantal que empezaba a ser demasiado viejo. Cojo un vaso y lo relleno de agua de la cubeta recién llenada por el servicio municipal de agua, o SMA, carros de madera y hierro con enormes barriles llenos de agua recién recogida del río que llevaban a las casas los bueyes más fuertes del pueblo todos los días a primera hora de la mañana.
- Buenos días mamá - Saludo como si nada intentando disimular antes de beberme de un trago el vaso entero de agua.
- Hombree, mira quién ha aparecido por fin – Definitivamente está mosqueada.
- Vendrás hoy al regreso de los mensajeros? – Intento cambiar de tema, con suerte me puedo librar de una regañina que ya se ha vuelto bastante habitual.
El regreso de los mensajeros es un evento que se celebra cada 21 días en el cual los mensajeros, habitantes de todas las especies de esta aldea que parten a poblados humanos cercanos para "coger prestados" tanto documentos de utilidad como ropa, utensilios y comida, regresan al pueblo. Era el momento más esperado por todos, la plaza se decoraba con pancartas y guirnaldas y la aldea entera se inundaba de música y festividad.
- Esta vez me quedaré en casa, tengo mucho por hacer. Por cierto, tienes en la mesa el desayuno preparado - dice señalando la gran mesa del salón donde comemos, al otro lado de la sala. En ella hay situado en el centro un bol grande de barro lleno de un montón de frutos, flores y bellotas típicos de la zona que debía haber recogido mi madre al amanecer, después de que pasase el SMA por casa. Me como todo de un bocado y salgo corriendo
- ¡Que tengas suerte con Fahron! -.
- ¡Gracias! La necesitaré - Me despido cerrando la puerta y saliendo corriendo.
Category Story / All
Species Bear (Other)
Size 1280 x 1032px
File Size 1.6 MB
FA+

Comments